Tras la reunión entre el Gobierno Nacional y la Central Obrera Boliviana – COB, donde se determinó incrementar el Salario Mínimo Nacional – SMN en un 10,8% de igual manera se acordó un alza salarial de 7% al haber básico; desde la Cámara de Exportadores, Logística y Promoción de Inversiones de Santa Cruz – CADEX, mantenemos nuestra posición y reafirmamos que el sector no está en condiciones de asumir ambos beneficios, en razón a las pérdidas y caídas considerables en las exportaciones.
Desde la CADEX, vemos con profunda preocupación esta decisión que de alguna manera empuja a una inviabilidad financiera del tejido empresarial formal del país, acción que repercutirá negativamente en la economía nacional, generando desempleo, quiebre de más unidades productivas, fundamentalmente las MyPes, y desincentivo a las nuevas inversiones. En suma, una caída del crecimiento económico y la competitividad de las exportaciones nacionales.
Desde el 2014 la desaceleración económica, además de la presión tributaria, los incrementos salariales, el contrabando, entre otros factores, han desmejorado el desempeño de los diferentes sectores productivos formales de Bolivia. En el caso de las exportaciones No tradicionales en 2016 se contrajeron en términos de volumen en 15% y valor 30 % respectivamente, con respecto al 2014.
Los incrementos salariales y dobles aguinaldo de los últimos años han “matado” a empresas, además de reducir las fuentes de inversión y de trabajo, dada la rigidez en la política laboral respecto al costo en la mano de obra al que es sometido el empresario, mismo que eleva los precios del producto final y resta competitividad frente a la oferta de otros países.
Es importante tener en consideración los costos adicionales que el empresario asume, no solo respecto al incremento salarial y dobles aguinaldos. La carga se hace más pesada aún por el aporte de riesgo profesional, la prestación solidaria de vejez, el aporte para cajas de salud y para el financiamiento de vivienda, la prima anual sobre utilidades, el bono de producción en la industria, el salario dominical, el bono de antigüedad, el pago mandatorio de quinquenio, los costos asociados a subsidios como lactancia y maternidad, entre otros.
El sector productivo exportador una vez más es golpeado con este tipo de medidas, como lo ha sido mediante el control de precios, las restricciones y los permisos de exportación.
Consideramos como una decisión irresponsable el incremento, y más aún no tener en cuenta la posición técnica, económica y financiera del sector empresarial que ha dado a conocer su falta de condición para asumir la imposición.
Oswaldo Barriga
PRESIDENTE ELECTO CÁMARA DE EXPORTADORES, LOGÍSTICA Y PROMOCIÓN DE INVERSIONES DE SANTA CRUZ